miércoles, 9 de febrero de 2011

La muerte de los Calín

La muerte se cebó muy pronto con los Calín. De los once hermanos Calín Romero sólo quedó uno que transmitió el apellido. No quedó constancia de las causas de la muerte aunque sabemos que la mayoría de ellos no pasó de los 4-5 años de edad. Estamos hablando de los años 1746-1760. La tasa de mortalidad infantil es muy alta en todos lados. No existen antibióticos, la medicina está muy poco desarrollada y las condiciones higiénicas de las casas, las calles y las ciudades son deplorables. Las grandes epidemias siempre fueron un problema muy serio en Cartagena, hasta el punto que su población no terminó de despegar hasta bien avanzado el siglo XVIII. La mayoría de las causas de los fallecimientos de los Calín fueron las fiebres de diverso origen, "las calenturas" que se decía antiguamente. Los más pequeños murieron de sarampión, Diftería, anginas gangrenosas, problemas con la dentición, gastroenteritis, etc. Los adultos de tuberculosis, pulmonías secundarias a gripe, derrames cerebrales, aplopejías y algunos de cáncer. Lo que jamás hubiera podido imaginar es que alguno de los Calín hubiera muerto por causas violentas. Cual fue mi sorpresa cuando descubrí que uno murió asesinado. "...por mano airada", dice la partida de defunción. Esta es una expresión antigua que se utilizaba para decir que había sido un asesinato intencionado. Lo que causa todavía más impresión es descubrir que ese Calín tenía sólo ¡¡¡ TRES AÑOS ¡¡¡ de edad cuando fue asesinado. Increible.

Los Huecos del Árbol

En algo tan complicado como la elaboración de un árbol genealógico de antepasados es normal que queden huecos, ramas de ese árbol sin completar, debido a la falta de fuentes de información. Muchas de esas ramas pueden ser pequeñas y no son determinantes, como cuando el apellido lo lleva la mujer y esa línea se interrumpe en la siguiente generación. Lo frustrante es cuando sabes que hay una rama importante del apellido y no encuentras a sus descendientes.
En el caso que nos ocupa me ha ocurrido con tres varones de la primera generación de los Calín, los hermanos Calín Romero (Casto, José Antonio y Pascual). Posiblemente murieron ya que en los dos siglos posteriores no quedó ningún rastro de ellos, al contrario que de su hermano mayor Isidoro del que descendemos todos, pero al no haber encontrado sus registros de fallecimiento queda la duda.

Otra rama importante es la formada por Pedro Calín Martínez, el sexto de los hermanos nacidos en Pozo Estrecho de los que descienden todos los Calín de Cartagena. Sabemos cuándo nació y que se casó en 1855 con Josefa Albaladejo Lorente, de Torrepacheco. Después no he encontrado nada más. Seguro que tuvo una gran descendencia, como todos sus hermanos, pero ha querido la fatalidad que no disponga de registros de esta localidad, al igual que la de Fuente Álamo. Confío que algún día alguien pueda echarnos una mano.

Hay muchas otras ramas que completar pero se corresponden a personas nacidas a finales del siglo XIX que es hasta dónde puedo consultar. Posteriormente no tengo más registros.
Es el caso de algunos de los Calín Paredes y Calín Nicolás de Totana, o dos de los Calín Pérez de La Palma (Francisco y Antonio).
Los Calín Vidal nacidos posiblemente en Canteras, Cartagena, hijos de Francisco Calín Aranda (Hermano de D. Isidoro "el de la Torre").
Los hijos de Isidoro Calín Ros, del que sólo conozco a Fulgencio.
Hubo un José García Calín que tuvo un almacen de hierros en Santa Lucía y en Marzo de 1933 sufrió un robo de material y de la caja de caudales, pero desconozco hasta la fecha a que familia perteneció.
También se de la existencia de Ginés Jorquera Calín que se casó en Murcia aproximadamente sobre 1920 con Gloria Molina Mollá, pero al igual que el anterior no se a que familia perteneció.

Queda mucho por hacer.